El historiador de la revolución Mexicana John Womack, fue quien llamó a esta etapa como la sagrada escritura de los zapatistas, documento escrito por Emiliano Zapata y Otilio Montano, el cual se firmó el 25 de noviembre de 1911. Su proclamación se realizó en Ayala, Morelos, el 28 de noviembre del mismo año. Constituye el manifiesto en el cual se proclamó la ruptura de la rebelión zapatista con el iniciador de la revolución Francisco I. Madero.
No solo se condenó la traición del más conciliador Madero, y es que el plan también hace un esbozo del Plan de Ayala, menciona los objetivos de la rebelión agraria de los zapatistas: restituyendo las tierras usurpadas a los pueblos durante el Porfiriato y también el reparto agrario de las tierras de los grandes hacendados, a quienes se les hizo la indemnización.
Los campesinos zapatistas establecidos en el Estado de Morelos, situado en el sur del país, reclamaron sus derechos con las armas, pues ellos alegaron que las tierras habían sido arrebatadas al pueblo por los caciques, hacendados y terratenientes, y que deberían ser devueltas a sus dueños originales.
Entre los estatutos que contenía el plan estaba el lema de la Reforma, Libertad, Justicia y Ley, es por esto que el plan sostenía que lo campesinos debían presentar los títulos de propiedad, los que en su mayoría eran de tipo comunal y se originaban el virreinato, títulos que fueron declaradas sin ningún valor por la Ley Lerdo, esta formaba parte de las Leyes de Reforma, lo que constituía una forma muy fácil de expropiar legalmente hablando, las tierras que los comuneros no trabajaban.
Ese plan había sido firmado por Emiliano Zapata y Otilio Montano, y fue publicado el 25 de diciembre en el periódico Diario del hogar.
Victoriano Huerta, asume el poder gracias a un golpe de estado y asesinato a Madero en 1913, entonces Pascual Orozco se une al usurpador, y es cuando Zapata, indignado por la actitud de Orozco, el 30 de mayo hace algunas reformas al Plan de Ayala, entre las más sonadas fue el desconocer a Huerta como presidente y también declara a Orozco traidor a la Revolución, Zapata fusila al padre de Orozco, igualmente rechaza la propuesta que le hizo Orozco, cuando trataron de convencer al caudillo del sur para que se uniera a Huerta.
Entonces toma el mando de las tropas que apoyaban a Emiliano Zapata, quien declara que no daría tregua ni descanso, hasta tanto haya que ambos traidores fueran derrotados y que los ideales del Plan de Ayala, se concretaran y se hicieran realidad.
Antecedentes del Plan de Ayala
En el gobierno de Porfirio Díaz “El Porfiriato”, se convocaron a elecciones en donde en candidato del partido Nacional Anti reeleccionista Francisco Madero, se enfrenta a Porfirio Díaz en esas elecciones y que darían el triunfo a este señor, triunfo obtenido con claras señales de que hubo fraude , entonces Francisco Madero, huye a los Estados Unidos, que fue donde redactó el Plan de San Luis, en el cual se llamaba a un levantamiento en armas de tal manera que se restituyera la democracia y devolverle a los campesinos las tierras arrebatadas por los hacendados.
Hubo gente interesada como: Emiliano Zapata, Pancho Villa, Pascual Orozco, entre otros, para elaborar el Plan de San Luis, solo con el fin de luchar contra el régimen de Porfirio Díaz.
“El Porfiriato”, fue depuesto y Francisco Madero, fue elegido Presidente de La República, el cargo lo asumió el 7e junio de 1911, para reunirse poco tiempo después con Emiliano Zapata, y exigirle que desarmara a su ejército.
Digamos que como requisito para que pudieran hablar sobre la condición de las tierras, no contento con esto, Zapata regresa a Morelos, manifestando que si las personas no habían podido conseguir la justicia después de levantarse en armas, menos garantías habrían de conseguirlas sin las armas, por último después de resolver el problema de la tierra, Emiliano Zapata, movilizaría de nuevo a su ejército.
Repercusiones del Plan de Ayala
El Plan de Ayala ponía en el tapete el perfil de Emiliano Zapata, quien era apodado El Caudillo del Sur, o bien El Atila del Sur, el poyo que tenía de las clases más bajas del sur de México, se reflejaba en el número de miembros de su ejército libertador del sur.
Se alió con Pancho Villa y Venustiano Carranza, derrotando a Victoriano Huerta, hechos que lograron en cierto modo un orden en el país, aunque esto fue algo temporal.
Zapata, no estuvo de acuerdo con Venustiano y con su congreso constituyente, cuestión que hizo se levantara en armas otra vez. Carranza ofreció una recompensa por la cabeza de Zapata, en última instancia, lo que como resultado daría paso al asesinato de Emiliano Zapata el 10 de abril de 1919.
El sucesor de Zapata, como líder del ejército del sur, Gildardo Magaña, alcanzó un acuerdo con el sucesor de Venustiano Carranza, Álvaro Obregón, en la que se trataba la reforma agraria en Morelos.
Gran parte la reforma se llevó a cabo durante la presidencia de Obregón, aunque solo se hizo en Morelos.